3 de enero - ¿Es que nadie me puede dejar tranquilo?

Feliz año nuevo. O lo que entendáis por feliz... Los últimos dias han sido delirantes, histéricos, llenos de problemas. Mi amigo Christian de Elche me lo decia: "no se como aguantas tanto". Y la verdad es que no lo se, ni tampoco se porque me complico tanto la vida por los demás, creandome unicamente problemas agotadores en mi propia vida. Pero imagino que no puedo evitarlo. Tengo una extraña habilidad para ponerme en la piel de cualquier persona e imaginar por lo que está pasando, como se siente y que debe estar pensado, y eso motiva mis acciones en muchos casos.

Después de todos los problemas derivados de las pruebas del VIH la pasada semana, me apetecía disfrutar de mi buen estado de salud y pasar unos dias de descanso ( o al menos, lo que yo entiendo como descanso). El jueves dia 30 fue un dia de trabajo impresionante en el que dependía praticamente de mi que una empresa en la que llevo dos semanas justas pudiera alcanzar sus objetivos económicos previstos para este año. Se cuando tengo un dia estresado porque me arde la cara de lo mucho que me sube la tensión. Suerte que ni tomo cafe ni nada por el estilo, pues el más mínimo estimulante creo que me llevaría directo al infarto de miocardio. Que cojones. Una ambolia de estas que te paralizan medio cuerpo. Ustedes no me han visto a mi en estado catatónico... Como ejemplo, la última vez que tuve un estrés insoportable (abril de 2004) acabé perdiendo un buen montón de pelo en la nuca. Simplemente cayó. Como diciendo "tu, que yo me bajo aquí, a mi dejame tranquilo de tantas tonterias. De todas formas, volvió a crecer y recuperé mi inconfundible sex-appeal, el cual podríamos equiparar al de un aguacate.

Así que el dia 31 me levanté tranquilamente a las 13h con una llamada telefónica de mi bienamado Terry, uno de los miembros (um... ex-miembro) que más tiempo han trabajado conmigo en mi antigua revista/fanzine, en mi programa de radio, y en mi web. Pero imagino que tengo un caracter complicado que acaba con la paciencia de cualquiera y el no ha sido la excepción (dos veces, además). Si algo tengo claro, eso sí, es que mi web y mi programa de radio los dirijo yo, y nadie más ha de decir nada al respecto. De ahí derivo una discusión online que acabó con su participación en los proyectos -de mutuo acuerdo.

DANI

En nochevieja venía a pasar la noche a mi casa Dani. Dani tiene 17 años. Le conocí chateando en diciembre de 2002 y desde entonces lo tuve en el messenger y hablabamos frecuentemente. Acababa de cumplir los 15 años y yo debia tener 18 si la memoria no me falla. Intenté quedar con él durante meses, pero sin éxito. Imagino que la timidez le podia y la diferencia de edad, también. No fue hasta junio de 2003 que estuvimos a punto de quedar. Me planté en su parada de metro y le envié un mensaje diciendo que estaba en su parada de metro y que quería conocerlo, AHORA. Pero el maldito se había echado novio y me respondio confesándolo. Maldita sea, ahora tenía que pagar otro viaje en el metro.

El chico con el que estaba tambien era conocido mio por internet. Cuando sobrevino la crisis -que a esa edad tardan poco en sobrevenir, habla uno que lo sabe bien...- estaba en medio de ambos, aconsejando, convenciendo de lo que era mejor, etc.etc. De hecho, por primera vez en mi vida creo que lo hice sin ninguna intencionalidad concreta mas allá de echar un cable. En fin, quedé con Dani la primera semana de julio, cuando el cartel de "libre" ya relucía de nuevo en su frente. Claro está, cuando su ex se enteró, me odió con todas sus fuerzas, pero hey, nadie dijo que la vida fuera fácil. El dia que quedé con él no me pude resistir demasiado y no tardamos en comenzar a vernos todos los dias. Curiosamente, en los últimos tiempos me he dado cuenta de que no nos conocíamos de absolutamente nada por entonces. El era tímido y yo estaba en mi fase de eogcentrismo mas exacerbada que recuerdo. Huelga decir que en tres semanas aquello estaba finiquitado, especialmente por mi dejadez (cinco dias sin llamar son muchos...).

En octubre de este año volvimos a hablar por messenger, aunque nunca nos habíamos borrado. Dani no es el típico chico gay como la mayoria de los que he conocido a lo largo de los años. No le gusta el ambiente, no le gusta el sexo esporadico pero le gusta tocar el piano, ver Barcelona durante horas y la gente sincera. Comenzamos a quedar de nuevo dentro de lo que se entiende estrictamente como amistad. Su amiga siempre venía con nosotros y además, yo estaba muy concienciado de que aquello no iba a pasar de ahí. Pero me gustaba estar con él, simple y llanamente. Ibamos viendonos semana si, semana también y le fui cogiendo cariño de nuevo. Además, en ese año y medio había perdido mucha de su timidez, y aunque siempre ha sido un chico muy frio, es parte de su encanto. Ahora podíamos hablar mucho más que antes, no porque antes no hablaramos, pero la variedad de temas ahora era bastante mas acusada. Y asi hasta un dia de diciembre...

Fue raro. Estabamos en un banco de Plaza Universidad en Barcelona, viendo pasar la gente como en otras ocasiones. Por alguna falta de calculo (o por algo muy calculado) Dani acabo con su cabeza apoyada en mi. Comencé a mimarlo y a acariciarle el pelo y la cara. Quizá estuve media hora en ese plan, y se me hacía raro que el no se distanciara. Desde ese dia me quedé algo confundido y había cosas que me hacían pensar que quizá el tenía algo de interés en mi mas allá de la estricta amistad de nuevo. Pero no lo tenia NADA claro. Hasta que me dijo que qué hacia en nochevieja. Olvidé los planes de cena con amigos y noche de Heavy Metal en antros abarrotados y le dije que no tenía planes (mentira podrida). Y le dije a mi santa madre que se vendría a casa un chico en nochevieja para pasar la madrugada juntos. Mi madre se lo comentó a su marido. Y su marido puso el grito en el cielo.

EL MARIDO DE MI MADRE, EL PADRE DE MI HERMANO, PADRE 2.0

El marido de mi madre, como el 80% de varones heterosexuales, no tiene demasiada simpatía por la homosexualidad. Recuerdo cuando llegué con mi primer novio a casa, con 16 años que tenia yo y muerto de vergüenza y le metió una mirada que faltaba el letrerito de "Scan completado, 100%, desea escanear otro documento?". Las broncas cuando he traído a alguien a casa han sido entretenidas. Si hubiera traído a casa a cada uno de los chicos con los que he estado, entendería que se enfadara y que considerara que mi habitación era el picadero oficial del reino. Pero -que ellos tengan conocimiento- solo han venido cuatro chicos a casa. Y se muy bien a quien elijo (excepto en una ocasión). Por eso, cuando después de una semana tensa de por si (esto acaba de comenzar), tuve que enfrentarme a una bronca por venir con Dani, un menor (oh!) de edad, a casa ya perdí los nervios y me subió la tensión cosa mala. Otra vez el ardor en la cara después de la bronca. Me daba a entender que con cuarenta años estaría buscando niños a las puertas de los colegios, y le dije que entonces metiera en una urna a mi hermano pequeño, no sea que lo tocara a sus tiernos siete años de edad. Es absurdo, completamente absurdo. No entiendo como la gente puede seguir teniendo según que ideas en la cabeza, pero no puedo ver solo lo malo de cada persona. Ese hombre me ha dado a mi hermano pequeño, ha traído estabilidad a mi casa, y gracias a el, mi madre dejó de ser una joven deprimida de 28 años por culpa de una separacion y un ex-marido algo despota y pasó a ser alguien bastante más feliz. Y yo también. Por eso, al dia siguiente, pese a que me habia hecho daño lo que había dicho, todo seguía igual con él. Las cosas buenas que ha hecho por mí le dan varias patadas a las malas. Pero quería pasar una bonita nochevieja y me la jodió. Punto y final.

DANI (2)

Así que me fuí corriendo a Barcelona a buscar a Dani, el cual estaba en estado de shock por su delirante cena de fin de año en familia. Lo rescaté en Plaza Universidad de las hordas de "marchosos" (como odio esa palabra, le metería una puñalada a cada persona que lo dijera y luego le echaría vinagre en la herida) que iban a pasar el año nuevo en lugares el triple de caros con el doble de gente. Fuimos andando a Plaza España y cogimos un autobus hasta llegar a mi casa, donde entramos sigilosamente a las cinco de la madrugada practicamente. Pusimos un video de los Simpsons, nos tapamos con el nórdico, trajimos dos vasos de Pepsi, y comenzamos a decir tonterias con la luz apagada y a hablar de mil cosas. Probablemente, la mejor nochevieja de los ultimos años, en los que ni siquiera he salido. Casi por inercia, lo abracé. Y el estaba en posición de "abrazame" (que no soy tonto). Posición fetal dandome la espalda, exactamente. Y a los abrazos le siguieron mis besitos por la cabeza, porque no sabía que hacer. Como Dani es tan raro en este tema, no sabía si darle un beso en los labios me iba a causar un distanciamiento con él o cualquier cosa. Hasta que vi que el también quería que es sucediera. Y besarle fue lo que hice. No hubo sexo, no hubo nada más que cariño. Y era justo lo que necesitaba. A las 10 nos despertó mi madre, para que su marido no celebrara el año nuevo viendonos acurrucados juntos en la cama (y es que mi madre vale su peso en oro) y lo acompañé a Barcelona en un taxi. Por suerte, el taxista se apiadó de mi cara de sueño y me llevó gratis a casa de nuevo. También cabe decir que en los últimos tres años debo haberme gastado cerca de 10.000 EUR en taxis, asi que los taxistas de mi pueblo me aprecian un montón.

AÑO NUEVO

El dia de año nuevo comenzó a las ocho de la tarde, cuando abrí los ojos y salí de la cama. En el movil, una llamada de mi abuela paterna. Mi padre se encontraba en un centro de desintoxicación para su adicción a la cocaína desde hace un mes y costó horrores meterle allí dentro. Sabía que la semana anterior había tenido problemas y que había solicitado el permiso de 48 horas para salir del centro porque su situación no era buena. Llamé a mi abuela y me confirmó que mañana volvía. Me entró la mala leche tremenda, pero en fin. Perdí mi trabajo de comercial en julio de 2004 porque estaba fatal anímicamente con la situación y no quería que todo el esfuerzo no sirviera de nada. Me quedé preocupado... y me hice a la idea de que al dia siguiente mi padre volvería.

MI PADRE

Desde que tenía ocho años se que mi padre toma cocaína como el que bebe agua mineral. El shock fue cuando a los 13 años el me lo admitió y me tiré dos semanas en estado de shock completo sin saber muy bien que hacer. Fue la razón principal de la separación de mis padres y bueno, siempre he intentado ayudarle sin éxito alguno, pues sigue adicto. Una adicción de 20 años a una sustancia no acaba de un dia para otro.
Ayer, dia 2 de enero, mi padré se escapó del centro en el que estaba interno. Sin documentación, sin dinero, con lo puesto. Además, el centro estaba precintado por Sanidad, debido a un brote epidémico dentro y la salida, aunque para abandonar el tratamiento, estaba prohibida hasta que Sanidad levantara la orden de cuarentena. Pero el se largó igualmente. Mi abuela me llamó destrozada, y llamé a mis tios de Girona, pues el centro estaba cerca. Mi tio me respondió con "dile a tu abuela que estoy ilocalizable y ya te digo que no pienso ir a buscarlo". Mis tios tienen bastante que ver con que mi padre, un hombre debil y carente de alicientes en esta vida, comenzara a tomar eso, pero ahora ellos han rehecho su vida y se desentienden, lo cual es acertado tambien. Llega un momento en que no puedes pelear contra lo que es inevitable. Mi otra tia mas pequeña, igualmente destrozada por la noticia, imagino que les convenció y fueron a bsucarlo y lo metieron en un tren. Ahora está en casa de mi abuela, y veremos a ver en qué plan viene. Ayer le habría dado dos hostias si lo hubiera visto... hoy siento pena por alguien que ha sepultado su vida (y la de su madre) bajo montañas de polvo blanco. Pero le he de agradecer su error. Pese al daño que me ha hecho, me ha empujado a no haber probado un cigarro en la vida, a no haberme emborrachado jamás y a no haber probado ninguna clase de droga en toda mi existencia.

Joder, que mañana MÁS aburrida en el curro. ¿Se nota?